Un buen uso de la gramática en español es sinónimo de un buen uso de la lengua, conocer bien la gramática del español te ayudará a poder expresarte mejor, a poder hablar sobre temas más elaborados y complejos y, sobre todo, a sentirte más seguro a la hora de escribir o hablar en español.
Pero aprender la gramática de una lengua extranjera parece siempre uno de los aspectos más difíciles del aprendizaje de lenguas.
Lo más importante es no obsesionarse con ella sino verla como algo que vas a ir aprendiendo a largo plazo y como parte de otros aspectos del proceso de aprender español, como aprender vocabulario, mejorar tu comprensión oral y escrita, el conocimiento de la cultura hispanohablante, etc.
De todas maneras, aquí tienes siete consejos que te pueden ayudar a mejorar tu gramática en español.
1. LEE MUCHO
Leer en español es la mejor manera de adquirir vocabulario, mejorar tu comprensión escrita y oral, entender muchas frases hechas que utilizan los hablantes nativos de forma diaria y, por supuesto, entender mejor la gramática y la estructura general del español.
Puedes leer lo que más te interese: libros sobre los temas que más interesen, novelas de amor, revistas, poemas, blogs, los subtítulos de tus series favoritas… todo lo que te dé ganas de seguir leyendo y continuar aprendiendo, pero lee fijándote en cómo se forman las oraciones, cómo están conjugados los tiempos verbales o en los puntos gramaticales que aún no conozcas, lee de forma activa.
Estar expuesto continuamente al español, te ayudará a recordar, revisar y utilizar la gramática que ya conoces pero también la que todavía no sabes, leer te ayudará de forma intuitiva a recordar en el futuro qué estructuras son correctas o no aunque aún no conozcas al cien por cien la razón por la que lo son.
2. CONSULTA UNA GRAMÁTICA BÁSICA
Es importante tener siempre a mano un manual de gramática española, o recursos similares en línea, que te ayude a tener una comprensión sólida de la gramática pero que, también, te sirva como referencia en los momentos de duda o cuando te surjan preguntas.
Esos momentos de duda son siempre buenos momentos para desarrollar tu aprendizaje y, además, está probado que se tiende a recordar mejor lo que aprendemos en contexto y lo que aprendemos porque lo necesitamos en el mismo momento en el que estamos hablando.
Así que en los momentos que tengas dudas sobre algún punto o norma gramatical, búscalo y no te quedes con la duda, seguro que acabarás recordándolo y poco a poco esas dudas irán desapareciendo.
Lo más importante es que ese manual de gramática esté bien organizado, con explicaciones claras y numerosos ejemplos sobre el uso de la lengua y y que, en él, la gramática se presente de forma progresiva para que se adapte a tu nivel de conocimientos.
Algunas de las gramáticas que recomendamos son las siguientes:
No te obsesiones en aprender las reglas gramaticales de memoria. Céntrate sobre todo en comprender los ejemplos dados, para lo que obviamente pueden ser útiles las explicaciones sobre las reglas, y sobre todo crea tus propios ejemplos de manera que conviertas esa regla en algo más personal y cercano a ti mismo.
3. CREA UN PLAN
Más que un plan, créate un hábito. Dedica un poco de tiempo cada día a tu español y comprobarás como irá mejorando casi sin darte cuenta y, si lo que quieres es mejorar tu gramática, entonces dedica un poco de tiempo cada día a ella.
Piensa en los pasos que deberías seguir para mejorar tu uso de la gramática, reconoce tu nivel y los aspectos gramaticales con los que tengas más problemas, y organiza los recursos que tengas disponibles para ayudarte a subir de nivel o comprender mejor los puntos gramaticales que quieras revisar.
Ten paciencia, céntrate en el proceso de aprender y no quieras adelantarte a lo que sabes. La gramática es algo complejo y progresivo, así que asegúrate que vas aprendiendo poco a poco y según tu nivel y no quieras ser demasiado ambicioso.
4. PRACTICA TODO LO QUE PUEDAS
Conocer la teoría es necesario, por supuesto, pero no basta para luego poder aplicarla en una conversación normal en la que tienes que decir algo de forma rápida e improvisada. Para hacer esto, es necesario practicar las normas gramaticales de la forma más constante posible para que, a través del hábito y de la costumbre, seas capaz de hablar de la forma más natural posible cuando sea necesario.
Es como hacer deporte. Al principio, antes de comenzar a hacer ejercicio de forma constante, te costará moverte y te cansarás en seguida pero, con la práctica, tu cuerpo se moverá de forma más natural y dejará de dolerte. Lo mismo ocurrirá con tu español si te acostumbras a hacer ejercicios gramaticales de forma habitual.
Existen numerosos recursos tanto en papel como digitales. Puedes utilizar los manuales de gramática que hemos mencionado en el punto anterior u otros adaptados según el nivel, aplicaciones que insistan en la gramática o, por supuesto, ¡puedes utilizar todos los ejercicios gramaticales que nosotros hemos ido publicando! Están divididos por niveles y son completamente interactivos.
5. PRESTA ATENCIÓN A LO QUE OYES
Al igual que es importante leer, también lo es escuchar español a través de todos los medios que tengas a tu disposición: podcasts, televisión, películas y series, canciones, actividades creadas para ser escuchadas o hablar directamente con nativos,… siempre lo que más te interese a ti para mantener tu motivación alta. Escuchar no solo te ayudará a mejorar tu pronunciación o entonación sino que también mejorará tu uso y comprensión de la gramática.
No solo es importante que entiendas lo que escuchas sino también cómo se dice, es decir, deberías prestar atención en lo posible a las estructuras que vas escuchando. Seguro que reconocerás estructuras que quizás no uses correctamente u otras que sí pero, en cualquier caso, escuchar español de forma constante te ayudará a revisar lo que sabes y corregirlo en caso de que cometas errores, reforzar conocimientos y, sobre todo, sentirte más cómodo con el idioma.
6. ESCRIBE Y ESCRIBE
La mejor manera de practicar lo aprendido es siempre utilizarlo. Escribir tiene la ventaja de que te da más tiempo para pensar y organizar bien tu respuesta, sin la presión añadida de tener a alguien esperando una respuesta inmediata.
Como cualquier otra habilidad, intenta escribir con regularidad en español para crear un hábito e ir poniendo en práctica lo que has ido aprendido para no olvidarlo. Es válido cualquier tipo de texto. Escribe tu agenda diaria en español, escribe un diario, un blog, ensayos cortos, comenta en foros online sobre temas que te interesen, busca una persona con la que intercambiar mensajes o incluso cartas, utiliza los dictados para mejorar al mismo tiempo tu comprensión oral, haz algunos ejercicios de escritura creativa o busca ideas o disparadores que te ayuden a buscar temas sobre los que escribir.
Después, revisa y corrige tus escritos para mejorar lo que hay hecho e identificar errores, aprender de ellos te ayudará a mejorar. Si puedes, encuentra a alguien que te ayude a corregir lo que escribes o te aconseje sobre como sonar más como un nativo.
7. BUSCA MANERAS DE HABLAR
Al igual que la práctica escrita, la práctica oral es esencial para mejorar tu gramática. Busca oportunidades para conversar con hablantes nativos de español, o no nativos, y únete a grupos de intercambio tanto online como en persona. La única manera de mejorar tus habilidades comunicativas es practicándolas.
Si al principio te sientes inseguro, es completamente normal. Algo que quizás pueda ayudarte a perder el miedo sea, antes de hacerlo en grupo, practicar solo en casa, crearte conversaciones contigo mismo en voz alta que incluso puedes grabar, para poder ir viendo qué dices bien o qué cosas puedes mejorar, y para perderle el miedo a tener que hablar en español.
Rodéate del idioma todo lo que puedas y crea situaciones en las que te ves forzado a utilizarlo: un restaurante, un evento relacionado con la cultura de los países en los que se habla español, un intercambio, un club de lectura, un viaje a un país hispanohablante,…
Y tú, ¿cómo has conseguido mejorar tu conocimiento de la gramática en español?